Oración para hoy Miércoles 4 de Septiembre del 2019.

Realiza todas las mañanas esta oración y ponte en manos de nuestro Dios eterno, para que brille en tu corazón mucha paz y tranquilidad para que puedas tener una jornada llena de muchas bendiciones y de buenas energías, es necesario encomendarte a Dios al despertar para que sea tu fiel protector en este día que ha de venir y cualquier obstáculo que se presente Dios interceda por ti.


Padre celestial, padre del creador de todo, Rey de la Misericordia, inmensa montaña de piedad, recíbeme bajo tu protección y amparo, a todos los que solicitamos tus favores, cúbreme y resguárdame bajo tu amparo, haz de este día el mejor de todos.


Amado Dios, te pido que, si durante esta hora o este día hubiese malas influencias contra mi persona o mis seres queridos, detén al instante su gesta de maldad y acabalo para siempre y bendícelos con tu perdón, que solo reciba de tu parte buenos augurios y bendiciones.


Que mi ruego llegue a ti como sinónimo de alabanza, escucha a tu hijo que no te abandona aun en los momentos de mayor tentación, mi amor por ti es grande y te agradezco por tu cuidado y por tu amor, te pido que me cubras con tu luz resplandeciente por siempre.


Te venero padre celestial, imploro tu presencia y favor pidiéndote que nos alcance de tu hijo precioso el consuelo de una buena conciencia, salud y vigor para servirte y venerarte, me inclino ante ti mi Dios, bajo tu templo tomo más fuerza y generalmente todos los males aquí tienen remedio.

Eres el remedio de mis necesidades mi Dios y especialmente por aquellos que te hacemos esta oración, espéranos amado padre, por tu intercesión encontrar lo que pedimos y requerimos, aunque no desmerecen nuestras culpas por la eficacia de tus ruegos.


Omnipotente rey del cielo cuanto se complace mi alma en la grandeza de tu poderío y elevación, aunque no merece este tu ciervo me recibas bajo tu amparo y protección ya que con mis pecados te he ofendido por favor no aparte los ojos de tu hijo que busca consuelo y perdón. Amén.


Ora todos los días, reza todas las mañanas con mucha fe, pídele a nuestro Dios amado y misericordioso que tengas un exitoso día, lleno de buenos deseos, abundancia y prosperidad. Amén.